jueves, marzo 08, 2012

Podríamos ser.


Podríamos ser dos delfines
sumergidos en la humedad profunda de nuestros cuerpos,
sometidos al vaivén de la marea
para naufragar al final del éxtasis.
Podríamos ser estrellas fugaces
viajando en una noche iluminada de luna llena
ofreciéndonos deseos
y buscando estirar el momento de brillo.
Podríamos ser labios ávidos de encontrarse
en besos que mezclan sensaciones,
reverberando en tu corazón azulado
con el sonido incesante que agita tu interior.
Podríamos ser un cuento
queriendo cruzar el límite de lo verdadero,
entre hadas, duendes y mágicos paisajes
con casas de chocolate dibujadas sobre tu piel bañada.
Podríamos ser tan sólo aliento evaporándose
entre caricias desnudas
que resbalan por el sudor mutuo
y desafían a los sentidos.
Podríamos ser el roce de un sueño
que nos lleve muy lejos
con los ojos cerrados
y no querer despertar para repetirlo.
Podríamos ser tan sólo aroma, sabor y tacto
si llego a tocarte con estas palabras.

jueves, marzo 01, 2012

El tacto de mis versos.

Anidado en la sensibilidad que trasunta tu ser,
descuidadamente al amparo de tu refugio
índigo cielo iluminado por regalarte
surcado por la inspiración de palabras y gestos.
Mezclando inocencia y desenfreno,
dulzura y pasión,
esta noche te escribo
intentando el roce perfecto.
Porque las palabras sólo son el pretexto
para llegar a la caricia
y las caricias el preámbulo
para llegar a provocarte.
Susurrante en la cercanía de tu oído
hasta que tu cuerpo me hable
de las sensaciones que te recorren,
el tacto de mis versos serán mi guía por tu piel.
Versos que acarician
como los dedos que los escriben para ti,
que al final no quede duda en ti de la dulzura
si de tu cielo hoy llueven gotas de deseo.

jueves, febrero 23, 2012

El sonido de tu nombre.

Tienes un aire de tranquilidad que se respira
en tu nombre que suena a mar rubí,
cada vez que vienes a dejarme tu susurro
es tu presencia la que así habla.
Y si de ti las rimas escapan
no me respondas con un poema,
sólo respondeme con tus emociones,
esas emociones que sé habitan en ti.
Que si mis sensaciones te llegan
bañándote con dulce placer
es porque tu sentir
inunda tu cuerpo de sensibilidad.
Estas letras son tuyas
como dulces caricias esparcidas por tu piel,
como besos tiernos resbalandose a la vez,
cierra los ojos, sientelas profundamente
y sueña ese paraíso de dulzura y calidez.