Tu cuerpo,
pródiga figura que encarna todos los deseos,
candorosamente embriaga y se vuelve tentación
ante mis ojos por ti llenos.
Templo donde reverbera tu corazón,
Templo donde reverbera tu corazón,
santuario de tu carne que exhorta mi placer
fecundando la voracidad en mi.
La medida exacta para consumir
La medida exacta para consumir
hasta el último segundo arrebatado al tiempo,
buscando retenerte en la mirada sin renunciar
a esa femenina criatura
a esa femenina criatura
que ejerce el magnetismo con sus proporciones,
un paraíso para perderse sin regreso.
un paraíso para perderse sin regreso.