No hay pincel que pueda pintar el como me pintas,
ni caricia que erice mi piel
con tan sólo un susurro de tus labios.
ni caricia que erice mi piel
con tan sólo un susurro de tus labios.
No hay lienzo que tenga la docilidad
que encuentro en tus formas
con tan sólo trazar el sentimiento que nos apasiona.
No hay mirada que hipnotice como lo hacen tus pupilas,
cuando me miran
me desean, me besan la vida.
Ni siquiera labios que sepan besar mi alma
cuando tu boca y mi lengua se hacen cómplices,
se agitan y bailan.
Ni palabras que cuenten y describan con justicia
cuando el mundo se detiene entre nuestras miradas
que se claman y declaran.
No hay pensamiento que no sea tuyo
porque en ti me encuentro y contigo me pierdo,
ni alas capaces de desplegar mi vuelo,
tan sólo tu piel amando cada poro de mis pliegues.
Perteneciéndote ahora y siempre.
Siendo la respuesta de tus sueños.
Cuando dos almas se unen es imposible soltarlas,
ni la distancia, ni el tiempo, ni la ausencia
desatan un amor tan puro.