Emerjo
hecho sentimiento desde el silencio,
con el erotismo incandescente
dentro de los pensamientos
para llevarte a viajar entre versos.
Centinela soy de tus sueños,
vampiro sediento que tu noche sobrevuela
encarnando en tu amanecer
la forma que quieras.
Dulzor perverso de niño,
fiera voraz, animal de fuego,
amante romántico,
Tu dueño y señor.
Dios pagano
que dominante se erige ante tus ojos
para entrar en tu mente
y ser tu debilidad,
tu placer más ardiente,
la humedad arrebatada
entre tus piernas latente.