jueves, julio 23, 2015

Me evaporo.

 
Le robo
desde el primer hasta el último sueño
habitándola cada noche,
inquietando
sus nocturnos pensamientos
enlazados a mí.
Rapto su cálido sudor
deslizado junto al mío
y dentro de ella me evaporo
como ardor que no cesa.
Al despertar correrá
como corre la brisa
para abalanzarse hasta mis brazos,
cuando aún soy pájaro
en la jaula de su vientre.


 

lunes, julio 20, 2015

Nuestro.

 
Me alcanza entre lo incierto
cuando menos la espero,
me roza y eriza
como suaves son sus dedos.
Encaramada sobre mis piernas
secuestra mi sonrisa
haciéndose ovillo
para albergarse en mi regazo
y me miente sin saberlo.
Sus manos, mis manos
en constante juego,
ese tan nuestro
de repetir a la vez lo que pensamos
y no necesita más
para ser mi atardecer y mi mar en calma
que hasta su sangre se ausenta
en mi falta.


 

jueves, julio 16, 2015

Osadía.


Era una osadía el acariciarnos
venciendo las barreras del tiempo
y las cumbres de la distancia,
robarnos mutuamente el juicio
cruzando tan solo palabras,
o creando un puente
donde se equilibraban hábilmente
nuestras iluminadas miradas,
para ser el vértice encumbrado
del amor que nos vistió con arrobo.