Ven conmigo,
lejos de todas las miradas
donde nadie pueda encontrarnos,
donde nadie pueda tocarnos,
donde yo sea tu único aire,
donde tú seas todo mi océano
y nadie más distraiga
tus ojos de los míos.
Que no oigas palabras disfrazadas,
que no haya presencias de fantasmas
olvida todo cuanto te ata,
todo aquello que gira en tus pensamientos
te espero como siempre,
como se espera lo que pertenece,
lo que nunca se ha ido,
lo que siempre será.
Ven conmigo,
seré de tus noches tu lucero