Arte es
dominar el curso de la emoción,
disciplinar las acciones
templando el espíritu en el aprendizaje,
alcanzando el equilibrio
entre cuerpo y mente.
Arte es
pulir a imagen y semejanza
marcar en ella mi presencia
sin dejar de expandir su esencia
enlazada a mi sentir,
ceñida a mi destino.
Arte es
amar con la misma dedicación
quien guía y quien sigue
con la respuesta carente de vacilaciones,
porque si para mí nació
se hará siempre mi voluntad en ella.