Sentir
la innata predilección
por transgredir las fronteras
de lo correcto.
Querer
conocer el sabor
de aquello
que no se ha probado.
Un motivo
para una causa,
una causa
para un efecto.
Ser
la inquietud
que agita la conciencia
que muda todo lo grita,
el laberinto
en el cual anhelar perderse
como lección empírica.
Una orden
para una respuesta,
una respuesta
para la complacencia.
Sentir
para ser.
Saber,
para entender.