Un beso de buen augurio
precede al viaje hacia los sueños,
farolillo que alumbra el sendero
alejando pesadillas y miedos.
Para encontrarnos
del otro lado del espejo
donde los cuentos
se vuelven verdaderos.
Porque no existe tiempo
para la locura de soñar,
para mecerse en el columpio
de las infinitas fantasías.
Duerme, duerme pequeña
abrazada a tu oso de peluche
que volaremos en esta aventura
Poema que forma parte de la propuesta: "Atrapasueños"
para el blog "Paraíso de Letras" de Ginebra Blonde.