Vigoroso es el pulso
en la agitación que con esmero
aviva el fuego y emerge
como feroz animal
de orgullosa firmeza
y briosa textura.
Cual divinidad
ensalzada con devoción
cuando comulgas con mi templo
elevado hasta los cielos
y te congregas fielmente
clavando tus rodillas al suelo.
Sé al amparo de mi sombra,
entrégate al absoluto,
di que lo deseas.