miércoles, marzo 31, 2021

Todo lo soñado.

Su memoria parecía solo retener sensaciones más que recuerdos, cada vez que visualizaba una imagen que venía a él intentaba ir a ese momento, como aquella imponente casona y su puerta enrejada, o aquellos libros cuyos títulos poco le decían. Parecían recuerdos de otra vida, o que alguien los había puesto en su mente.

Incluso sus pesadillas le eran tan ajenas, los pájaros negros revoloteando y esos escenarios lúgubres de sus sueños. Pero en ninguno estaba ella, solo en los momentos presentes. Respiraba por y para él, queriendo agradarle en el más mínimo detalle, esa falda que sabía le gustaba, o las coletas  que siempre le hacían sonreír tras un duro día de trabajo. Quería ser la caricia anhelada, la palabra siempre esperada, el calor no sentido, el beso nunca recibido. Tan real y perfecta como todo lo soñado.

Era la proyección de sus deseos reflejados en su rostro de niña y la promesa de hacer todo cuanto él deseara, tal como rezaba el anuncio donde por vez primera la vio y quiso tenerla en su vida. Aunque no pudiera realmente tocarla.

© DUlCE


Nota: Este microrrelato como requisito de la propuesta, está inspirado en los personajes de Joi y K de la película "Blade Runner 2049".  

Microrrelato que forma parte de la propuesta "Secuencias"
para el blog "Paraíso de Letras" de Ginebra Blonde.
También publicado en "Lovely Bloggers" bajo etiqueta © DUlCE.

lunes, marzo 22, 2021

Culmen.

La veo retozar
serpenteando en su avidez
con el vértigo de su lado
ansiando caer
fulminante sin renuncia
en la propuesta de mi juego.
Y me apropio de sus pensamientos
propagándome entre silencios,
me convierto en un tropel
que penetra y devora
con implacable lujuria.
Porque ella es férvida miel
que desde su interior rezuma
siendo culmen palmario
de todo lo imaginado.

domingo, marzo 14, 2021

Almenas.

Mi lengua crea espirales
que se entornan con viveza
a tus pechos altos como almenas,
desde donde domino
todo aquello
que por mi nombre se agita.
Y mi saliva es muselina
suave y fina
cubriendo el rubor
esparcido por tu tersura,
que embebida se adhiere
al amparo de húmedos pálpitos
y trémulos vocablos
que anticipan tu clímax.