miércoles, enero 25, 2023

El Baile por Sandra IV.

Al encuentro de los deseos
acudió a el Baile,
su llave abrió nuevos anhelos
que postrada y libré de culpas
confesó sin pudores.

© DUlCE -


Muchas gracias Sandra.
Besos dulces.



BAILE DE MASCARAS 2022




Gracias DULCE por la invitación a tan esperado BAILE DE MASCARAS





POETIZA tenía en sus manos la invitación para el BAILE DE MASCARAS que cada año organizaba el DULCE caballero amigo en su elegante y misterioso castillo, a quien siempre agradecía por incluirla entre sus selectas invitadas.

POETIZA había esperado todo el año para asistir a ese BAILE DE MASCARAS tan interesante y ya tenía todo preparado para su viaje, seria largo y pesado para ella que vivía tan lejos de tan mágico lugar, pero valía la pena realizar el recorrido porque sabía que la esperaba la tentación, la emoción y la dulzura.

POETIZA emprendió el viaje llena de entusiasmo, los caballos iban veloces por la carretera, al llegar y bajar de su carruaje POETIZA suspiró y un estremecimiento le recorrió la piel, hacia frio, y cubriéndose con el chal negro que ella misma había tejido, se cubrió los hombros desnudos, llevada puesto un sencillo vestido blanco ceñido al cuerpo que le llegaba hasta los pies.

El castillo brillaba en todo su esplendor, estaba totalmente iluminado, caminó unos pasos y aquella gran puerta de elegantes diseños se abrió y un elegante caballero la recibió, era su amigo DULCE que sonriente la condujo del brazo hacia el centro del salón donde le ofreció una copa de delicioso y juguetón champagne,
después de unos breves momentos le propuso buscar una llave que la llevaría a abrir una puerta de las habitaciones del castillo, POETIZA se sonrojó pero decidió jugar y se retiró a un rincón donde al ir caminando tropezó con una llave dorada que tomó en su mano izquierda, caminó unos pasos tímida y nerviosa, luego corrió escalera arriba sin vacilar, llegó apresurada hasta una puerta que a ella le llamaba la atención, metió la llave en la cerradura y abrió, su corazón desbocado, estaba asustada o emocionada, la música sensual seguía llenado en salón, la habitación estaba a oscuras y cerró la puerta, un estremecimiento la sacudió asustándola, estaba donde quería, donde la casualidad el destino o los dioses le habían concedido su deseo, un aliento DULCE junto al oído le hizo sentir sensaciones desconocidas cuando escuchó aquella voz sensual que la invitaba a confesar sus pecados, obediente se arrodilló ante aquel hombre vestido de negro que le ordenaba confesar, con timidez pero sin miedo al castigo que merecía bajó la cabeza y recibió el castigo esperado en el CONFESIONARIO

La música seguía en el salón, en el centro del mismo las bellas invitadas bailaban y reían felices disfrutando de la compañía de DULCE que a cada una atendía con dulzura y elegancia.

La noche fue esplendida e inolvidable y ya entrada la madrugada POETIZA se despidió del anfitrión con un sencillo hasta pronto y ruborizada aun emprendió el viaje de regreso a su ciudad donde la esperaba la realidad pero iba libre de culpas después de haber confesado sus pecados y recibido su castigo en el CONFESIONARIO.



Blog de mi amigo DULCE

EL DULCE SUSURRO DE LAS PALABRAS







Sandra Figueroa
BAILE DE MASCARAS
2022

lunes, enero 23, 2023

El Baile por Ginebra Blonde V.

Giró la llave con osadía
para cruzar la puerta
ávida de sorpresas,
y entre libros prohibidos
un secreto le fue concedido.

© DUlCE -


Mi gratitud Querida Gine.
Dulces besos cariñosos.



Baile De Máscaras De Dulce (2022)


DULCE SECRETO
 

    Elin, una joven muchacha cuyo nombre vikingo significaba resplandeciente, recibió por sorpresa una invitación para un baile de máscaras de fin de año. No sabía la procedencia ni el motivo de dicha proposición, pero más allá de su timidez y su dulce inocencia irradiando por cada poro de su blanquecina piel, había una mujer aventurera y pasional dispuesta a aceptar cualquier experiencia que la hiciese vibrar; así que, a pesar del misterio que encerraba aquella situación, leyó las indicaciones de la nota que había junto a la tarjeta y, deseosa y excitada, aceptó. 
 
 
    Debía llevar un vestido apropiado para el evento y... de fácil acceso a los recovecos de la piel... Eligió uno de ceñido corpiño anudado a la espalda, y de muy sutiles y finos bordados de oro que jugaban con el propio resplandor de su aterciopelada tez y su dulce mirada hambrienta de vida.  
 
    Cuando traspasó aquella gran puerta de recia madera, supo que el castillo que ahora acogía su presencia, iba a atraparla entre sus innumerables salas y pasillos con suelos alfombrados; entre aquella música que sonaba y acariciaba los sentidos, y entre tantos rostros cubiertos de sugerentes máscaras y esplendorosos trajes.
    
   Un camarero, también con máscara y vestido con frac, le ofreció, sobre una bandeja de plata, una tarjeta proponiéndole un nuevo reto, una copa de champagne y, rodeando a esta, una cinta violeta de la que colgaba una extraña y llamativa llave. Cogió la copa y, apenas se mojó los labios para dar un sorbo, deslizó sus dedos hasta llegar a ella.
 

    Su "apetito" comenzó a aflorar como rocío en primavera…
   Y, como una niña escondiéndose de entre los invitados y las muchas miradas que se cruzaban entre sí, fue dirigiéndose a unas largas y anchas escaleras que, sin ninguna duda, llevaban a una de las puertas que su llave abriría.  
 
    La tercera cerradura que probó fue la que le cedió el paso. Antes de entrar se detuvo para observar y mirar hacia el fondo de aquella estancia con su ya habitual curiosidad, y con ese temor pululando en su estómago y que aún la excitaba más. Lo que había ante sus ojos era una enorme y hermosa biblioteca desprendiendo ese peculiar olor que tanto le gustaba, e invitándola a bailar y sentir entre cada uno de sus libros que parecían esperarla y abrirse para ella.
    Sabía que aquello solo era el principio; el magnífico preludio de lo que iba a ser una velada profundamente intensa…
   Apenas había cruzado la puerta, una voz sutil, pero penetrante, sonó como eco rozando sus sonrojadas mejillas, indicándole que caminara hacia una mesa de basta madera que había al fondo de la biblioteca; 
    y lo hizo… 
    ruborizada y húmeda… 
    pero, lo que ocurrió después…, 
    es otra historia; un secreto… que 
    solo 
    el anfitrión conoce...

 

 
   ©Ginebra Blonde  



Mi más sincero agradecimiento por tan exquisita y elegante invitación, mi querido Dulce. Un placer haber asistido y disfrutado de la velada…
 
Feliz Año para ti y para todos los amigos Blogueros. 
Brindo por todos y cada uno de vosotros 🥂 
¡Nos vemos en enero! 💜


domingo, enero 22, 2023

El Baile por Campirela VI.

Pasional bajo la Luna
se dejó admirar
y buscando la aventura
su llave le abrió
las puertas del goce
de par en par.

© DUlCE -


Muchas gracias Campirela.
Besos dulces.




La Invitación (La llave)

 




LA LLAVE

Un año más mi invitación fue entregada en mano, al abrir el sobre lacrado vi que había algo dentro de él, no tarde en averiguar que se trataba de una nota adicional en la cual indicaba que a la entrada en el hall, tendríamos que elegir una llave y a partir de ahí comenzaría nuestro juego de fin de año.
Me fascino la propuesta, en esta ocasión era nuestra intuición o suerte la que nos depararía una noche inolvidable.
 El rojo fue mi color elegido para mi vestido, me sentía pasional, tal vez esa luna que regía el firmamento me influía demasiado.
Mis hombros los dejé al descubierto, la abertura del vestido en la parte derecha dejaba mi pierna libre para ser admirada, sin llegar a ser demasiado atrevida, lo justo para dejar la mente pensativa si debajo de aquella tela de satén había alguna prenda más.
Al llegar al Castillo del anfitrión, todo era misterioso, hasta las luces del camino con esas antorchas le daban un simbolismo sobre natural, las puertas al contacto con mis tacones se abrieron de par en par, un mayordomo me recogió mi capa negra, al entrar sobre una mesa de mármol blanco había siete cofres abiertos dentro de ellos siete llaves, era curioso todas estaban en su lugar¿Habría sido la primera en llegar?


En ellos no solo estaba la llave, sino al lugar que pertenecían, desde una Biblioteca, pasando por una habitación violeta y un confesionario, además de otras cuatro más.
La duda creció en mí, ante tanta variedad era complicado elegir, tarde más de un minuto en decidirme, elegí la llave que me abría, un mundo de aventuras La llave pertenecía a la biblioteca sin quitarme mis guantes, avance la cogí entre mis manos, en ese instante algo me recorrió por mi espina dorsal.
Durante mi búsqueda a la aventura no vi a nadie, solo oía esa música de piano con sus notas sensuales, sobre la mesa central la gran variedad de viandas dieron el primer placer a mi cuerpo, no pobre nada, pero si tome una copa de los muchos cócteles variados que mis ojos observaban y mi boca deseaba saborear.
Elegí el del color rojo esta noche, tal fuera el presagio de una velada pasional y, que mejor que el rojo inundara mi interior.
Mi búsqueda llegó antes de lo previsto, la puerta  tenia un minúsculo símbolo— Un  libro hecho en relieve   se encontraba en el hall, no dude en abrirla, mis ganas de saber que me acechaba me hicieron que tuviera un pequeño problema al abrirla, nada que no se solucionará, al abrir me sorprendió su luz y el silencio, pero ese olor que embriagaba la sala, los muebles de madera de roble cubrían las paredes.
Una voz sonó desde algún lugar ...
Adelante has elegido la llave que te hará volar a cualquier lugar
Es lo que he venido a buscar, la aventura que me haga elevar tan alto que tarde un año de regresar a poner los pies otra vez sobre el asfalto de la ciudad.
¡Tus miras son muy elevadas! tal vez tengas que ayudarme a que eso que deseas llegue a suceder.
Estoy segura, que así será, un caballero siempre ha de complacer a su dama
Pues si así lo crees, no seré yo quien no ponga interés.
La voz dejó de sonar, en su lugar una melodía comenzó a sonar, la luz se fue haciendo más tenue, sentí unas manos sobre mis hombros descubiertos, ellas estaban calientes y su aroma penetró en mí como por arte de magia, sus labios carnosos seguían el curso de mi cuello, no llegaban a tocarme, pero si a acariciarme, sus manos se aferraron a mi cintura y por primera vez sentí su cuerpo tras de mí.
No me atreví a girarme, quería seguir en esa posición, él detrás cada más excitado, oler su aroma me embriagaba, sentir su entrepierna me hacía vibrar, solo giré sobre mí al son de aquella melodía.
Nuestros testigos fieles eran los volúmenes que había en esas estanterías, cada uno de ellos me transmitía que movimientos iba a realizar, y así fue como sin darme cuenta sus ágiles dedos desabrocharon mi vestido cayendo al suelo, allí estaba desnuda con mis tacones, guantes y mi máscara, y él contemplado mi figura.
La velada transcurrió como en una nube, el acto realizado no fue un sexo tradicional, fue algo más sublime, algo más mágico, fueron dos almas uniéndose en el placer supremo, esa noche de fin de año jamás la he de olvidar, no solo las letras danzaron en esa sala, mi cuerpo fue como una espada afilada  dando el estoque final, mil orgasmos saltaron y en cada uno de ellos mis gemidos se incrustaron en ese libro abierto en blanco que presidía nuestra gran aventura de pasión.

Campirela_


PD. Gracias siempre Dulce, por esta invitación que cada fin de Año es un placer asistir.
Mis mejores de deseos para ti , y todo aquel que se acerque por esta ventana de ilusión e imaginación.