La distancia a veces solo puede ser un concepto relativo, más cuando no es impedimento para hacer sentir cercanía en cariño, en demostraciones, en presencia, a pesar de los kilómetros que puedan separar. Y cuando esa distancia se diluye y deja de existir, sentimos en cambio la cercanía de quien ha roto esa barrera.
Y de esa manera fue que, en un vuelo de larga distancia, llegó a mí el primer poemario de Cora, "Entre mis alas". Cruzando el océano me trajo de manera tangible lo que ya conozco de ella en tantos años de compartir. Su poesía sincera, su elegancia al momento de versar sobre la vida, los sentimientos, el erotismo, la sensualidad. Su capacidad para transmitir y hacer sentir.
Esto no es una reseña, esto es un agradecimiento a ella por este pedazo grande de su ser que desde hoy tengo conmigo.
Yo me abrazo a tus alas, yo me dejo llevar, yo vuelo contigo ...
Gracias por compartir conmigo este sueño cumplido.
No hay palabra alguna que describa con justicia lo que eres, ni poeta que en su atrevimiento capte la esencia más pura de tu vuelo. Aquellos que lo intentamos, sólo osamos creer que podemos.
"Me vacié por dentro
sin coraza ni armadura
para que vieran mi alma.
No es mucho, pero lo es todo ..."
© Cora, del poema "Empatía"
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