Creció en un barrio de calles estrechas, con paredes coloridas por los grafitis y ropa tendida en los balcones, donde el tiempo se medía por los momentos compartidos entre amistades. algún trago, algún cigarro y la música como el pan de cada día sobre las aceras.
En esas calles que eran su vida, las palabras brotaban de su boca sin dar respiro, se ramificaban una tras otra en completa libertad tomando distintas formas, a veces eran una caricia, otras una certera daga. A su lado un amigo marcaba el ritmo con un hábil beatbox y alguno más bailaba mientras se le oía cantar:
"Cause I'm beginning to feel like a Rap Goddess, Rap Goddess. All my people from the front to the back nod, back nod ..."
Y así sucedía, todos a su alrededor asentían porque sabían que en su barrio ella era la Diosa del Rap.
© DUlCE.
Relato que forma parte de la propuesta "Amor de Barrio " de Dafne Sinedie para la convocatoria semanal "Un jueves, un relato".
Gracias Dafne por la invitación.