De elegante negro y tacón
entró por primera vez al Salón
dejando en manos del azar
el dulce juego que le hizo probar
la guinda del postre.
- © DUlCE -
Muchas gracias Tracy.
Besos dulces.
BAILE DE MÁSCARAS
En Nochebuena apareció esta invitación colgada en el Árbol de Navidad:
Enseguida descubrí que había tenido el honor de ser invitada al famoso Baile de Máscaras organizado anualmente por DULCE.
Mi corazón empezó a latir tan rápido, que temí no poder asistir al Baile por tanta excitación me producía con tan sólo pensar en él.
Según he sabido por las invitadas en años anteriores, el brillante anfitrión, echa su imaginación a volar y prepara un Juego, que parece ser que este año consiste en encontrar durante el baile , llaves de las estancias de Palacio. Abrir puertas y contar las experiencias vividas.
Me encantará encontrar cualquiera de ellas, la curiosidad me mata por conocer el Castillo y más aún por conocer a su propietario, dicen que es muy apuesto y sobre todo que tiene una educación muy exquisita. ¡Qué nerviosa estoy!
Mis nervios están tan a flor de piel, que no pensaré en la dichosa llave, dejaré que actúe el azar.
Quedan pocos días, el baile es el día de Reyes y no sé que traje me pondré para la ocasión, ha sido todo tan precipitado...
Creo que optaré por un traje largo de color negro.
Me lo voy a probar ahora mismo... ¡qué nervios!
Del peinado tengo poco que pensar, eso sí , me pondré unos pendientes que me favorezcan muchísimo de esos que te dejan vestida aún estando desnuda.
Y un tacón impresionante. Ya me estoy viendo: ¡un espectáculo de mujer! ¡¡¡Ay, si me viera Quien yo me sé!!!
Lo del tacón... no sé cómo resultará, porque no me los pongo desde la boda de una amiga mía que ya está hasta divorciada..... Estas invitaciones se avisan con tiempo, porque con los kilos que he engordado en las Fiestas , voy a estar horrenda y ya no me da tiempo ni hacerme una liposucción, ni a inyectarme colágeno...
Llegó el día, que no se me olvide la Máscara.
¡Allá voy!
Me recibe el anfitrión, Dulce,
Muy elegante, me besa la mano y me acompaña al salón, mientras con su mirada me quita hasta los pendientes, uffff... ¡cómo mira....!
Pensando en "mirar"... Me viene a la cabeza cómo voy a encontrar la llave si con la máscara no me puedo poner las gafas y sin las gafas no veo... ¡¡¡Horror!!!
Dulce, atento y perspicaz, me radiografía el pensamiento y me tranquiliza?????? con su mirada y su "savoir faire" se acerca a mi oído y con un susurro apenas perceptible me dice:
- Disfruta, la última llave que quede por encontrar, será la tuya y ya sabes que la guinda del postre es lo mejor de la noche.
© Tracy