Ante mí se abrió el cielo
en vastedad ofrecido
al cometa que lo surca
en libre vuelo.
Como saeta enclavada
repta por regados valles
y en el monte de tu saber
bebo de tu agua de gozo.
Te respiro,
mientras la sierpe fustiga
con impetuoso deseo
el amplio paisaje
que le ofrece tu cuerpo.
Solo el caudal de tu pozo
me salva de esta sed
y aun así querré
no saciarme de ti.
Sensual poema. Tan apasionado hay sed que no se sacia nunca. Te mando un beso.
ResponderEliminarComo ocurre en este caso, insaciable sed por ese pozo de agua fresca.
EliminarBesos dulces, JP y dulce noche.
Hay paisajes frondosos y uno de ellos es aquel pozo inagotable de placer.
ResponderEliminarUn poema con una excitante carga erótica.
Un beso, feliz semana.
No hay mejor paisaje que aquel que incita a los húmedos placeres.
EliminarBesos dulces, Campirela.
Un pozo que, mientras haya pasión, siempre dará de beber ;)
ResponderEliminarMe encantó el poema. Al principio, la imagen me desconcertó hasta que "visualicé" la composición de cómo sería completa.
Dulces besos que no pasen sed
Pasión, deseo, ganas van nutriendo ese pozo generoso en aguas de gozo. Visualizar, imaginar, también nos lleva a encontrar mucho más.
EliminarDulces besos que visualices.
Y bueno, hacía tiempo que no venia a leer tu poesía para mi bastante definida y clara,mientras exista pozo genuino y gozoso,feliz sea el que calme su sed.Un abrazo!
ResponderEliminar