Una gota desde tu boca
diluida entre sabores,
una sonrisa desde tus ojos
que reposa en el respiro de tu mañana,
una oportuna caricia
de lento desliz sobre tus pechos,
un indescriptible aroma
desprendido de un sueño,
una puerta para dejarse ir
hacia el milagro de tu secreto,
un color que tiña
de fuego los sentidos,
un poema que sea como aire
penetrando tu agonía
y el misterio en ti guardado